Construir el Poder Judicial del mañana desde la visión de sus grupos generacionales
- Detalles
- Publicado: Martes, 05 Diciembre 2023 11:31
- Gary Bonilla Garro, integrante del Consejo Superior, representante de abogados y abogadas que trabajan en el Poder Judicial, que no administran Justicia
La experiencia adquirida durante 18 años en la institución, ocupando diversos cargos judiciales que no administran justicia, le permitió a Gary Bonilla Garro determinar la ruta de su trabajo como integrante del Consejo Superior; dirigido a propiciar la construcción del Poder Judicial para los próximos 10 o 15 años, desde la visión de los grupos generacionales que lo integran.
Considera vital revitalizar el sentimiento de pertenencia de la población trabajadora con el Poder Judicial, desde la importante labor que cada servidor y servidora judicial aporta a la institucionalidad del país.
Adaptar a la institución a la visión de los cuatro grupos generacionales que lo conforman es una prioridad, su amalgama permitirá definir el Poder Judicial de los años venideros. Hoy día, la institución cuenta con 100 hombres y mujeres que integral la generación Baby boomer (nacidos entre 1940-1960); 223 Centennials (nacidos a partir del 2000); 5894 Generación X (nacidos entre 1961-1981) y 7366 Milennials (nacidos entre 1982-1999).
“Mi compromiso es construir desde la convergencia de nuestros grupos generacionales, el Poder Judicial de los próximos años, materializarlo y cimentarlo desde la visión de la institucionalidad y la planificación estratégica, humanizando la labor que realizan todas las personas funcionarias”, destacó Gary Bonilla.
El impacto de su trabajo en cargos dentro de la Defensa Pública y como letrado de la Sala de Casación Penal, hoy se constituye en una retroalimentación para conocer y entender más a fondo las necesidades de la población de las abogados y abogados que no administran justicia, “ y esto me permite traducirlas al Consejo Superior de una manera más adecuada, para la toma de decisiones administrativas dentro del Gobierno Judicial”, puntualizó Bonilla Garro.
“Desde la nueva gerencia, la gerencia moderna, nos corresponde como Consejo Superior garantizarle a las personas funcionarias las herramientas para que puedan realizar de mejor forma y sin complicaciones sus labores, y cumplir con nuestro objetivo institucional de administrar una justicia pronta, cumplida y de calidad”, destacó el integrante del Consejo Superior.
Afirma que desde el máximo órgano administrativo judicial se trabaja en un acercamiento a todos los despachos judiciales para conocer el estado actual de las oficinas, y que la política administrativa que se ejecuta responda a sus requerimientos; lo anterior se realiza a partir de la escucha de la población judicial, y giras a las oficinas.
Gary Bonilla Garro tuvo su primer acercamiento con el Poder Judicial, como estudiante de Derecho, siendo parte del proyecto de Consultorios Jurídicos de la UCR, en el 2005. A partir del 2006 asumió funciones como asistente jurídico de la Defensa Pública y al graduarse en la Licenciatura de Derecho, ejerció como defensor público, entregando su trabajo entre otros lugares, a la comunidad de Guatuso, Upala, San Joaquín de Flores, Limón, Desamparados, y San José, donde se especializó en la atención de asuntos procedentes de la Ley de Penalización de la Violencia contra las Mujeres, cuyo trabajo se focalizó en la reconstrucción de nuevas masculinidades y una visión integral para el abordaje de las personas ofensoras.
Dentro de la Defensa Pública también asumió cargos de defensor supervisor y coordinador de la oficina en Alajuela. Dio sus aportes como letrado en el Programa de Justicia Restaurativa de la Sala de Casación Penal, en el 2021 comenzó a dedicar su trabajo al Consejo Superior como integrante suplente y en mayo del 2023, fue designado como integrante propietario.
Hoy, su preparación académica como Licenciado en Derecho, Máster en el Estudio de la Violencia Social y Familiar, cursos de especialización en Derecho Constitucional e intercambios internacionales en materia de violencia doméstica, crimen y ciberdelincuencia, retroalimentan la labor administrativa que desempeña en el Consejo Superior.